Siguen las proclamaciones diplomáticas desde distintas latitudes respecto a la situación en Venezuela, donde este miércoles luego de masivas marchas opositoras el presidente de la Asamblea Nacional se autoproclamó presidente de Venezuela y fue reconocido por varios países de América, con Estados Unidos, Brasil y Argentina a la cabeza.

Rusia criticó este jueves lo que considera injerencia en asuntos internos de Venezuela, al referirse a algunas reacciones internacionales a los acontecimientos en este país, que pueden abrir la vía al caos y a un «baño de sangre».

«Una injerencia extranjera destructora (…) es inaceptable. Ello es una vía directa hacia la anarquía y el baño de sangre», dijo el ministerio ruso de Relaciones Exteriores en un comunicado.

«Vemos en las acciones descaradas de Washington una nueva demostración de la ignorancia total de normas y principios del derecho internacional», añade el ministerio, refiriéndose al apoyo abierto de Estados Unidos al autoproclamado presidente interino de Venezuela, el opositor Juan Guaidó.

«Exhortamos a los políticos venezolanos razonables opuestos al gobierno legítimo de Maduro, a que no se conviertan en peones de una partida de ajedrez extranjera», prosigue el comunicado.

Por su lado el Kremlin aseguró este mismo jueves que Nicolás Maduro es el «presidente legítimo» de Venezuela, y denunció la «usurpación del poder» por parte de la oposición.

¿Nueva guerra fría?

China, por su parte, expresó un contundente apoyo al gobierno del presidente venezolano Nicolás Maduro y censuró la «intrusión en asuntos internos» por parte de Estados Unidos en el país caribeño después de que Washington reconociera como legítimo al mandatario interino, Juan Guaidó, quien preside la Asamblea Nacional.

«China apoya los esfuerzos del gobierno de Venezuela para mantener su soberanía, independencia y estabilidad», afirmó en rueda de prensa la vocera del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Hua Chunying.

«El 10 de enero, China y muchos otros países y organizaciones internacionales enviaron representantes a la ceremonia de toma de posesión del presidente Maduro», apuntó en respuesta a una pregunta sobre si Beijing sigue respaldando al gobernante venezolano.

Además, Hua destacó que su país «se opone a la interferencia en los asuntos internos de Venezuela» y deseó que la comunidad internacional haga «esfuerzos en este sentido» para poner fin a la misma, indicó la agencia de noticias EFE.

Hua dijo que China tiene interés en que «las partes en Venezuela procedan en el interés fundamental de la nación y del pueblo bajo las premisas del respeto a la Constitución para resolver las diferencias políticas a través del diálogo y las consultas».

Zona intermedia

Desde España, el ministro de Exterires Josep Borrel, afirmó que las «elecciones» son la «única salida posible» para resolver la crisis en Venezuela tras la autoproclamación el miércoles del opositor Juan Guaidó como presidente interino.

«Tenemos que evitar que la cosa vaya a peor y eso exige sin duda un proceso de intervención para garantizar la única salida posible que son unas elecciones» dijo Borrell ante la prensa.

La Unión Europea (UE) había urgido a escuchar al pueblo venezolano, haciendo un «llamado masivo a la democracia», y pidió el inicio «inmediatamente de un proceso político que conduzca a unas elecciones libres y creíbles», aunque no reconoció a Guaidó.

Estados Unidos y otros países del continente, como Argentina, Canadá, Brasil, Colombia, Panamá, Perú, Ecuador, Costa Rica, Guatemala o Paraguay han expresado su apoyo a Guaidó mientras que México, Uruguay, Bolivia, Cuba, Nicaragua, República Dominicana no lo reconocieron. De otros continentes, Irán y Turquía son algunos de los que no retiraron su apoyo al presidente chavista.

Maduro sucedió en el poder a Hugo Chávez tras su muerte en 2013 y fue reelecto en mayo pasado en unos comicios que contaron con revisión internacional y fueron boicoteados por la oposición, que además desconoció los resultados.