China y Rusia enviarán sendas delegaciones a Corea del Norte con motivo del aniversario del armisticio de la guerra de Corea, en la primera visita conocida de responsables extranjeros a la capital norcoreana, Pyongyang, desde la pandemia de Covid-19.

«Una delegación militar de la Federación de Rusia, encabezada por el ministro de Defensa Serguei Shoighu, visitará la RPDC (República Democrática de Corea, nombre oficial de Corea del Norte)», anunció la agencia de noticias norcoreana KCNA, un día después de confirmar que una delegación china también asistirá a las celebraciones, previstas para pasado mañana.

Rusia es uno de los pocos países que mantiene relaciones amistosas con Corea del Norte y es uno de sus aliados históricos.

El líder norcoeano, Kim Jong-un, recientemente manifestó su apoyo a la invasión rusa a Ucrania e incluso, según Estados Unidos, suministró cohetes y misiles a Moscú.

«Esta visita contribuirá a reforzar los lazos militares entre Rusia y Corea del Norte y constituirá un importante paso para el desarrollo de la cooperación entre los dos países», declaró en un comunicado el Ministerio de Defensa ruso.

China, principal socio comercial de Corea del Norte, también confirmó que enviará una delegación a Pyongyang, dirigida por el miembro del Politburó Li Hongzhong.

«Consideramos que la visita contribuirá al desarrollo sano y estable de las relaciones entre China y Corea del Norte, al fortalecimiento de la paz y la estabilidad en la región y la creación de condiciones para la resolución política del problema de la península», declaró la vocera del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Mao Ning, en una rueda de prensa.

El jueves, Pyongyang acogerá las celebraciones por el 70º aniversario de la firma del armisticio, conocido como Día de la Victoria en Corea del Norte.

Los combates de la guerra de Corea terminaron con un armisticio firmado el 27 de julio de 1953, pero a falta de un tratado de paz, las dos Coreas siguen técnicamente en guerra.

El jueves, se organizará un gran desfile militar en la capital, además de otros eventos durante la semana.

La llegada de los representantes de China y Rusia constituyen las primeras visitas conocidas de delegaciones extranjeras a Corea del Norte desde el inicio de la pandemia.

El hermético país impuso un rígido bloqueo desde principios de 2020 para protegerse del Covid-19, impidiendo incluso que ciudadanos norcoreanos regresaran a casa.

China indicó que su delegación viajaría a Pyongyang el miércoles, de lo que se deduce que sus integrantes no tendrán que someterse a ninguna cuarentena antes de los actos del jueves.

«Se espera que Corea del Norte aproveche el hecho de que China aprueba su desarrollo militar presentando un nuevo misil ICBM en su gran desfile militar», analizó Yang Moo-jin, presidente de la Universidad de Estudios de Corea del Norte de Seúl, consultado por la agencia de noticias AFP.

Según el catedrático, la visita de esa delegación podría indicar que la frontera entre Corea del Norte y China podría reabrirse en un futuro cercano.

Ayer, Corea del Norte disparó dos misiles balísticos, informaron las autoridades surcoreanas, tras varios ensayos armamentísticos en las últimas semanas.

Las relaciones entre las dos Coreas están en un nivel muy bajo. La diplomacia entre Pyongyang y Seúl se encuentra bloqueada y Kim animó a acelerar el desarrollo armamentístico, incluyendo el arsenal atómico del país.

En respuesta, Seúl y Washington han llevado a cabo ejercicios militares conjuntos, que a menudo han implicado el despliegue de activos estratégicos estadounidenses en la región.

La semana pasada, un submarino nuclear estadounidense hizo escala en el puerto surcoreano de Busan.

Y el lunes, otro submarino estadounidense, de propulsión nuclear, llegó a una base naval surcoreana.

En medio de esta escalada, China aclaró este martes en la ONU que aplica «estrictamente» las resoluciones de ese organismo sobre Corea del Norte, después de que países occidentales pidieran a Pekín expulsar de sus aguas a petroleros sospechosos de abastecer a Pyongyang.

Asimismo, pidió «a los actores relevantes» implementar las resoluciones de la ONU sobre Corea del Norte, «especialmente las provisiones vinculadas a reanudar el diálogo, reforzar los esfuerzos diplomáticos y promover una solución política».