La difícil situación económica que atraviesa el país –con una inflación desenfrenada que día a día deteriora los salarios y derrumba el consumo– se siente con contundencia en los barrios rosarinos. Para afrontar este panorama, y agobiados por el recuerdo del 2001, vecinos de zona sur decidieron reunirse todos los sábados en asamblea en la esquina de Ayacucho y Arijón, para poner en común sus problemáticas y encontrar una solución colectiva.

Las reuniones vecinales –que están abiertas a toda la comunidad– comenzaron el pasado 3 de febrero y se repetirán cada sábado, a las 19, en Ayacucho y Arijón. En el lugar se colgará un pasacalle que anunciará la asamblea, se realizará un cacerolazo y, posteriormente, se dará lugar al intercambio entre los presentes.

Para conocer más sobre la iniciativa, Conclusión dialogó con el referente del Centro Comercial Ayacucho y uno de los impulsores de la asamblea vecinal, Sergio Nazzi, quien comentó: “Comenzó de forma autoconvocada. Varios vecinos y comerciantes de la zona notamos un escenario muy similar al del 2001 y, como en ese momento participamos de asambleas, empezamos a organizarnos y convocamos a una primera reunión que fue el sábado pasado, con vecinos, vecinas, comerciantes, jubilados, docentes e integrantes de comedores populares. Fue una reunión muy rica de ideas”.

Y agregó: “Fue muy diversa la asamblea, pero los acuerdos fueron muy rápidos, porque tienen que ver con el daño que nos viene produciendo, en muy poco tiempo, el nuevo Gobierno nacional, pero también provincial y municipal”.

Al ser consultado sobre qué problemáticas plantearon los asistentes, Nazzi detalló: “Rechazamos el DNU de Milei porque nos perjudica totalmente la vida. Los precios suben sin control, con una inflación triplicada a la del Gobierno anterior, y sin expectativa de que baje. Se vienen los tarifazos, en Rosario ya tenemos el del transporte urbano de pasajeros, que fue del 50%, pero viene el de la luz, gas, agua, la medicina prepaga, la obra social, la farmacia, la gente está dejando de comprar sus medicamentos. En la caja de cualquier super del barrio duele el corazón ver la gente que agarra cinco productos y se lleva dos, ir a la verdulería y que se venda de a una fruta, con los precios en la pizarra por unidad”.

Ante esta situación crítica, los vecinos acordaron repetir la asamblea cada sábado a las 19 en Ayacucho y Arijón. “Puede ser que nos acompañe algún artista o grupo cultural, que ayuda a juntar más vecinos. Vamos a tener un equipo de audio para que la palabra circule sin ser molestados por el ruido ambiental de una arteria tan importante”, adelantó el comerciante.

En el encuentro del pasado sábado también se resolvió “acompañar” a las distintas actividades que se realicen en la ciudad para rechazar el DNU, la ley ómnibus y el protocolo antipiquetes. Asimismo, a partir de este sábado 10 de febrero comenzarán a realizar una colecta de alimentos, los cuales se donarán a un comedor del barrio al que el Gobierno nacional “le cortó la ayuda alimentaria”.

En los próximos días, los vecinos presentarán un petitorio a la Municipalidad y al Concejo de Rosario para pedir que se retrotraiga el último aumento en el boleto de colectivo, que llevó el pasaje a $340; al tiempo que solicitarán al gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, que “bonifique al 100% el sellado del contrato de alquileres, para paliar la dificultad del acceso a la vivienda”.

Por último, Nazzi dijo que de momento no mantienen diálogo ni con el Gobierno municipal ni con el provincial, y denunció que hay “funcionarios que se creen que están muy arriba de la gente”.

La de Ayacucho y Arijón es sólo una de las asambleas barriales que se conformaron en Rosario en el último tiempo. También hubo reuniones y manifestaciones vecinales en barrio Tablada, Belgrano, en el Mercado del Patio, en San Martín y Ayolas, Mendoza y Avellaneda, Rondeau y Herrera, y en San Martín y Guatemala, entre otros puntos.

Precios que no paran de subir y comercios que cierran sus puertas

Al ser consultado sobre cómo vienen las ventas del Centro Comercial Ayacucho, Nazzi sostuvo: “Las caídas de las ventas en enero son normales, pero la de este año fue terrible, mucho mayor a la de años anteriores”.

Asimismo, indicó que “todas las semanas” reciben nuevas listas de precios con aumentos, y que cada comercio “trata de amortiguar un poco y ver cómo lo maneja”.

Por otro lado, advirtió que en el Centro Comercial que integra cerraron dos comercios en la última semana, mientras que otros tres bajarán sus persianas en los próximos días.