La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner participó este miércoles del acto central por el Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia que se realizó en la porteña localidad de Las Flores, donde sostuvo que es “una paradoja que los que están en contra del Estado, de las intervenciones, son los mismos que durante la dictadura estatizaron sus deudas”.

La ex presidenta remarcó que “las políticas de memoria, verdad y justicia castigaron a los que violaron los derechos humanos”, pero aseguró que hubo sectores que “necesitaron de la desaparición y tortura para imponer un modelo económico”.

“A los que estatizaron sus deudas y apoyaron a la dictadura no les pasó nada. Terminaron más ricos y nos dejaron ese regalo. Entre ellos, la familia y del grupo económico de ya sabemos quién. Se hicieron los otarios cuando todos los argentinos debimos pagar la deuda de ellos”, señaló la Cristina Fernández de Kirchner en una clara alusión al expresidente Mauricio Macri y su padre, el empresario Franco Macri.

Durante el acto, donde estuvo acompañada por el gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, y el titular del bloque de Diputados del oficialismo, Máximo Kirchner, la ex presidenta agregó: “Fíjese que dos extremos, aquellos que fueron los que interrumpieron un gobierno constitucional son los que los instigaron y generaron la deuda”.

Por otro lado, la también ex senadora nacional expresó la voluntad que tiene la gestión de Alberto Fernández de pagar la deuda externa y remarcó que el Frente de Todos es “el único espacio político que nunca endeudó a la Argentina y pagó las deudas de todos los otros gobiernos”.

Previamente, sobre el acuerdo con el FMI que negocia el ministro de Economía, Martín Guzmán, Cristina Kirchner dijo que “los plazos y tasa son inaceptables”, y remarcó: “No tenemos la plata para pagar, creo que este 24 de Marzo debe ayudarnos a reflexionar sobre la necesidad imperiosa de retomar un modelo de producción y empleo, aunque es cierto que las dificultades son extremas”, en referencia a la pandemia.

En ese contexto, remarcó la responsabilidad no solo de los gobernantes sino también de la oposición de “apoyar al Gobierno en sus negociaciones con el Fondo Monetario Internacional”.

Además, reivindicó la gestión de las vacunas que está haciendo el oficialismo: “¿Quién diría que en medio de esta pandemia atroz que conmueve a la humanidad, que nos ha roto todos los esquemas para gestionar el Estado, quién diría que las únicas vacunas con las que contamos serían vacunas rusas y chinas?”, se preguntó.

Y agregó: “Con visión multilateralista pudimos contar con las vacunas rusas y chinas. No tenemos problemas con los Estados Unidos, no tenemos anteojeras ideológicas, déjense de joder con lo de comunistas. Nunca escondimos nuestros gustos con los intereses internacionales como hacen otros, aunque me guste Nueva York, no confundo la defensa de los intereses de los argentinos”.

Sobre el tramo final de su discurso volvió a exhortar a la oposición a lograr “acuerdos mínimos frente a temas estructurales como el endeudamiento y la economía bimonetaria porque si no va a ser muy difícil gobernar la Argentina, tal vez imposible”.

Por otro lado, la vicepresidenta aseguró que lo que se modificó en el 2003 –año en el que asumió a la presidencia Néstor Kirchner- en Argentina “fue una matriz de producción económica y fundamentalmente un sentido común de nosotros los argentinos y argentinas”.

La ceremonia se realizó en Las Flores ya que allí se dispuso la apertura de un Espacio de la Memoria que funcionará en un ex centro clandestino de detención y tortura, en lo que era la ex Brigada de Investigaciones de la localidad.

Durante la última dictadura militar, ese predio fue parte de un circuito represivo que incluyó a otros centros de detención de la región como “Monte Peloni”, la cárcel de Azul y el Regimiento 10 y “La Huerta”, ambos de Tandil.