El pasado lunes, y luego de las elecciones primarias, en donde el candidato del liberalismo Javier Milei resultó el más votado, el Gobierno Nacional elevó el precio del dólar oficial y llevo adelante una devaluación del 22% en la moneda argentina. Esta situación impactó negativamente en casi todos los sectores de la economía, entre ellos los supermercados, que ahora afrontan una situación crítica: mientras algunos productos indefectiblemente aumentarán su precio, una suba excesiva podría agravar la caída de consumo que el rubro registra desde hace tres meses.

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Para conocer más sobre la situación que vive este sector, Conclusión habló con el vocero de la Cámara de Supermercados y Autoservicios de Rosario, Juan Manuel López Raidó, quien observó: “Venimos con un grado de incertidumbre a partir del día lunes, con una devaluación ya marcada del 20%. La mayoría de los proveedores que tienen insumos dolarizados están analizando cuál va a ser el precio final de los productos”.

En este sentido, detalló que en las góndolas de los supermercados pueden encontrarse algunos productos que requieren pocos insumos dolarizados, mientras que otros están “muy fuertemente atados” al precio de la divisa norteamericana. Por este motivo, adelantó: “Indefectiblemente va a haber remarcación, pero hay un grado de cautela en relación a cuánto va a ser el precio final de cada uno de los productos”.

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“Estamos pidiendo listado de precios a algunos proveedores, pero aún no están enviando, son muy cautos. Venimos con tres meses consecutivos de caída de las ventas, es un contexto de 120% de inflación, donde el consumidor es más cauto en cuanto a los productos que está comprando y ha pasado a las segundas y terceras marcas”, explicó López Raidó.

Y consideró: “El consumidor ya no afronta una compra exuberante como en otro momento, por eso tampoco se puede elevar mucho el precio del producto. Se está reconfigurando todo el mercado en cuanto a precio final y capacidad de compra, que está cada vez más disminuida por los salarios, que no hacen pie para equiparar la inflación constante”.