Aldo Battisacco – Conclusión Buenos Aires
El sociólogo y analista internacional Walter Formento, habló con Conclusión sobre la influencia que Estados Unidos y Gran Bretaña tuvieron en la corrida cambiaria que tuvo lugar días atrás en la economía argentina, y destacó que ambos países están perdiendo poder global. Asimismo, destacó positivamente el acercamiento de Argentina con China, nación que, a su entender, se posiciona como uno de los polos dominantes.
“Esta crisis y la aceleración de la jugada por imponer el dólar como moneda cotidiana y de circulación obligatoria dominante, permitió observar que aquellos actores subordinados a las estrategias del poder financiero internacional, global y norteamericano tienen cada vez menos fuerza para poder lograrlo, lo intentaron, pero no pudieron porque el mundo es otro, tiene nuevos actores estratégicos internacionales que dominan el escenario”, dijo el director del Centro de Investigaciones en Política y Economía.
En este sentido, aseguró que Estados Unidos y Gran Bretaña están “perdiendo peso” mundial, e indicó que “los dolarizadores dieron un manotazo de ahogado”.
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En esta línea, Formento destacó la decisión del Gobierno Nacional de comercializar con China bajo el esquema monetario del yuan: “El país no le va hacer caso a los intereses financieros que quieren imponer la dolarización y profundiza su relación con yuan. Esta situación consolida un hecho de desdolarizaicón que rompe la estrategia de golpe de estado por estrangulamiento de falta de dólares”.
“Argentina ganó un grado de libertad que seguramente irá profundizando”
“En el orden de toma de decisión estratégica, hay que partir por resolver la amenaza principal, planteada en este caso por Estados Unidos, con un estrangulamiento a partir de dólar. Viéndolo en términos de relaciones de poder, nuestra única amenaza en los últimos días ha sido Estados Unidos y Gran Bretaña, no China. Poner en el mismo lugar a estos países es un gran error estratégico”, agregó el especialista.
Al hacer un repaso histórico, el investigador recordó que Argentina primero estuvo bajo influencia británica y luego de Estados Unidos y, en este marco, sostuvo que China es “un actor emergente en el escenario del poder internacional”, que puede ser una amenaza para el país “de aquí a cuarenta o cincuenta años”.
“Esta intención de golpe financiero no tiene que ver tanto con la economía, sino con el momento electoral que está viviendo la Argentina”
Formento también manifestó que China, Rusia e India construyeron las condiciones para pacificar las relaciones entre naciones vecinas, potenciar los vínculos comerciales y desarticular los escenarios bélicos construidos por la OTAN.
“Este último imperio, el de gradualismo financiero, tuvo su fase inicial a principios de 1600 y duró hasta 2020. Marcó la acumulación de una oligarquía y el desposeimiento de la minoría. Pero ahora estamos viendo el proceso de apertura del nuevo ciclo hacia un nuevo actor que ya no es el financiero, y que durará por lo menos 400 años. Este marco es muy auspicioso este escenario internacional para las características que tiene la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) y el lugar de Argentina, Brasil y México ocupan en ella. Argentina tiene una posición geográfica importante en el gran paso bioceánico, cuando el centro de gravedad ya no es el Atlántico sino el Pacífico”, completó.
Por último, Formento advirtió que este nuevo escenario mundial demanda una “gran responsabilidad” de los cuadros políticos, empresariales, económicos y sindicales. “Ahora Argentina puede profundizar su relación con la economía multipolar, alternativa a la economía financiera que plantean Gran Bretaña y Estados Unidos”, concluyó.
