En el primer semestre de este año, se acrecentó el fenómeno de los cierres de fábricas, que traen aparejados los despidos de miles de trabajadores. Esto se desprende del último informe del Centro de Economía Política Argentina (Cepa).

Desde el 1º de enero de 2017 hasta el último 30 de junio, se contabilizaron 22.369 despidos y suspensiones en todo el país. La crisis se profundiza cuando se tiene en cuenta que este número se suma a las 264.143 cesantías acumuladas desde diciembre de 2015.

En el informe del Cepa, se pone en evidencia que uno de cada cuatro despidos en el sector privado del último trimestre se debe al cierre de empresas o plantas de producción, una situación que se repite a lo largo y ancho del país.

“Es posible destacar que durante el primer trimestre de 2017, los despidos y suspensiones de la industria representaron el 74% del total y reducen su participación a 62 por ciento en el segundo trimestre”, señaló el comunicado.

La crisis laboral que atraviesa a Argentina se acentuó en este segundo trimestre del año, donde tomaron dinamismo los despidos vinculados a distintos servicios y los que rondaron el 23% durante el primer trimestre y el 36 durante el segundo.