Aldo Battisacco – Conclusión Buenos Aires

En el marco de la sesión especial convocada para este miércoles donde se tratan proyectos de producción orgánica, violencia digital, créditos UVA, acompañante terapeútico, declaración de un monumento nacional en Santa Fe y regularización de deudas de municipios con el Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (Enhosa), se cruzaron con acusaciones e imputaciones verbales diputados y diputadas del Frente de Izquierda de los Trabajadores y el referente de Avanza Libertad, José Luis Espert, quien denunció penalmente por promover el delito de sedición, al presidente de la Nación Alberto Fernández, a la vicepresidente Cristina Fernández, a los ministros de Seguridad Aníbal Fernández y del Interior, Wado de Pedro, al secretario de Derechos Humanos Horacio Pietragalla Corti, y a los diputados nacionales de izquierda Myriam Bregman, Nicolás Del Caño y Romina del Pla.

Según se desarrollaba la sesión, Romina del Pla, planteó como cuestión de privilegio lo que ocurre en Jujuy, y afirmó que «hay un pueblo que se reveló contra la reforma constitucional reaccionaria de Morales, y especialmente la docencia contra las feroces condiciones de trabajo, los salarios de hambre donde ya se cumple un mes de movilizaciones y cortes».

«Cuando se ve el intento barroco y mediocre del diputado José Luis Espert, que trata de presentar el problema como una sedición y pidiendo nuestra expulsión, no admite demasiado análisis, no sabe de lo que habla, le recordamos que la burguesía llegó al poder en el régimen capitalista con una cantidad de revoluciones importante y que la Constitución de la que él habla, durante más de diez años no se aplicó en el territorio de Buenos Aires porque hubo una rebelión», señaló la legisladora.

«La cuestión que importa son las relaciones sociales, y cuando se pretende imponer condiciones de saqueo de los recursos naturales y de las tierras de los pueblos originario, cuando se pretende imponer los salarios de hambre y las condiciones laborales, la población se revela. Morales tiene miedo porque se unificó la lucha de la docencia, los trabajadores estatales, a las organizaciones piqueteras que pasaron por encima de las multas y las causas penales, porque ganan las calles con los reclamos de los desocupados y precarizados».

Por su lado, la diputada Myriam Bregman salió a responderle al líder de Avanza Libertad, quien no solamente presentó proyectos para expulsar de la Cámara baja a ella y sus pares Nicolás Del Caño, Alejandro Vilca y Romina Del Plá, sino que además los denunció penalmente por el delito de sedición.

“Esperamos que sea fuertemente repudiado”, pidió y chicaneó: “Es un diputado que no pudo dirigir ni siquiera un bloque en esta Cámara y en la Legislatura de Buenos Aires. Terminó de colectora de Horacio Rodriguez Larreta y quiere proscribir a la izquierda”.

En la misma línea, la precandidata presidencial recriminó que “en Jujuy, con la reforma constitucional, quieren prohibir que las mujeres salgamos a la calle a repudiar los femicidios, como se hace habitualmente en Jujuy; quieren prohibir que las docentes salgan a la calle a reclamar por sus salarios; que las comunidades originarias denuncien el saqueo del litio y defiendan sus tierras”.

“Y ahora a Espert se le ocurrió la gran idea de prohibir a la izquierda. Bueno, no va a poder”, dijo enfáticamente y agregó: “Quiere dejar sin representación política a la izquierda y a todos aquellos que nos votaron”. «Llama  la atención que nos llame sediciosos a nosotros cuando él en plena pandemia acompañó un motín policial, y es parte de los diputados que se babean cuando las grandes patronales agriaras cortan las rutas y hacen lock-out».

La respuesta de José Luis Espert, no se hizo esperar, y si bien no estaba en la lista de oradores, Cecilia Moreaui que presidia la sesión le otorgó la palabra, y comenzó su elocución pidiendo una cuestión de privilegio contra la diputada Miryam Bregman: “Yo creo que la diputada Bregman debe ser de las primeras negacionistas que yo conozco de la izquierda. ¿Negacionista de qué? Que el muro de Berlín se cayó, diputada, no existe más la alucinación en la que usted vive. Yo no quiero que proscribir a nadie, yo quiero que se aplique la ley. Lo que usted quiere es que en Argentina rija la ley de la selva y, mal que le pese, en Argentina no rige la Constitución de la Unión Soviética, rige la Constitución argentina, sancionada en 1994, hija de la Constitución liberal de aquel prócer llamado Juan Bautista Alberdi”.

En ese sentido, defendió sus proyectos y denuncia, al decir que el artículo 22 de la Constitución “establece que el pueblo solo gobierna a través de sus representantes y cuando un grupo de personas cree atribuirse los derechos de defensa de ese pueblo, está cometiendo el delito de sedición”.

Mientras que el Código Penal “establece claramente cuáles son las penas para los que cometen los delitos de sedición”, que es el “levantamiento violento contra la autoridad”. Sobre ello, apuntó que el artículo 235 del mismo dice que “si la persona que alienta la sedición además es funcionario público, además de prisión le cabe la inhabilitación” de cargos públicos.

“Ustedes no respetan la ley, siendo una vergüenza para esta Cámara de Diputados. Son delincuentes, porque han cometido el delito de sedición”, disparó.

Aludido, Nicolás Del Caño le salió al cruce : “Es un burro, tiene que leer, porque nosotros somos trotskistas. Él está reivindicando como que nosotros apoyamos a la ex Unión Soviética estalinista”. “Es un impostor, porque se presenta como un liberal, pero es un siervo del señor feudal Gerardo Morales, además de un aplaudidor de Larreta”, lanzó.

“Aunque Morales diga que estamos quemando autos en Francia, la verdad es que todas las luchas de los trabajadores y las trabajadoras, de las mujeres y la juventud, las hemos acompañado siempre, y eso lo sabe todo el mundo. Nosotros somos coherentes, diputado”, resaltó.

Finalmente, el legislador expresó que “usted nos dice sediciosos y ya se lo explicó mi compañera: usted fue a apoyar el motín policial. O sea que solamente vale para ponerse la gorra, pero no para apoyar a las comunidades originarias”. “Existe el derecho a la insurrección, cuando los trabajadores y los oprimidos son violentados y avasallados por los gobiernos de turno”, completó.